Con el cambio de siglo y el reinado de Internet, el mainstream estalló en una constelación loca de pequeñas culturas alternativas y Los Simpson, que eran el sol de la galaxia, pasaron a ser una estrella más, una luz tenue que, a lo lejos, todavía titila. Aunque, seamos justos, hicieron lo imposible: fueron los más masivos y los que, al menos durante diez temporadas, pusieron la vara más alta.
Mauro Libertella/Culto No conozco a nadie de mi edad que, en su infancia y adolescencia, no haya englutido raciones excesivas de capítulos de Los Simpson. Por diversas razones, Los Simpson siempre estaban ahí: había canales que los transmitían prácticamente en continuado, como si se tratara de una cadena nacional en amarillo, o alguien soltaba en cualquier momento alguna […]
