Creadores indígenas-populares de contenido digital
Una constante danza entre lo local, lo global y lo digital desde la etnicidad
“Creo que mi vida es TikTok”, se ríe y continúa contando su proceso de creación de videos, “soy cholita paceña y modelo de cholita”- se vuelve a reír y esta vez se escucha emoción en su voz. La conversación duró aproximadamente una hora. Su nombre es Jhosselyn Santalla, joven boliviana con 38.2 mil seguidores en TikTok.
La Chola Bocona “me he puesto ese título (en su canal de YouTube) porque yo solo siendo bocona he podido sobrevivir y contar mi propia historia”– sus manos acompañan el ritmo de sus historias, arriba y abajo, a un lado y al otro. Yola Mamani Mamani, chola feminista, integrante de Mujeres Creando y ex trabajadora asalariada del hogar, empezó su canal con el fin de crear espacios reflexión desde su mirada de chola.
Sentado en un escritorio, vuelve a mirarnos y dice “Y además quiero transmitir… que estoy tratando de demostrarle a la gente qué es un quechua natural como lo hice en mis últimos vídeos de TikTok”, termina diciendo Wilfredo, un joven boliviano de 25 años de edad de la comunidad de Totora que enseña quechua a través de videos en TikTok.
Cada creador de contenido citado anteriormente tiene un objetivo distinto detrás de sus cuentas en redes sociales, pero mostrando detrás de cada vídeo elementos de su etnicidad.
¿En qué contexto surgen estos creadores bolivianos?
Acceso al internet en Bolivia
En Bolivia el 67.5% de la población es internauta (AGETIC, 2017). De la misma, el 95% de las personas mayores de 14 años tiene acceso a internet móvil en Bolivia. De esta manera, el 68% se conecta a redes sociales como una actividad frecuente y el 45% busca entretenimiento o farándula (AGETIC, 2017).
Las redes más usadas entre las personas mayores de 14 años son Facebook, WhatsApp y YouTube. (AGETIC & UNFPA, 2019). Es necesario mencionar que las redes sociales nuevas como TikTok, We Chat, Jitsi Meet no se visibilizan en las encuestas ya que, la misma fue elaborada el 2016. Sin embargo según una encuesta realizada el año pasado por la OCDE, se sabe que Tik Tok es la red más usada entre los jóvenes (Arcos, 2020).
Actualmente existen 6.9 millones de usuarios de Facebook activos en Bolivia, en cambio en Instagram alrededor de un millón de usuarios (RedPlan, 2021). Por otro lado, no existen datos acerca de los usuarios en TikTok, We Chat o JitsiMeet.
Sin embargo, a pesar de ese uso creciente de las diferentes redes sociales, se ha observado que es principalmente un uso para el consumo. Se necesita la producción de contenido que refleje la diversidad del país y es aquí donde ingresan los creadores de contenido.
Creadores indígenas-populares
La respuesta saltó, eran las 21:30 un viernes en la noche “En ese contexto para mi ser chola es una manera de rebeldía, de lucha, de ser una mujer emprendedora” cuenta Yola, la Chola Bocona.
Bolivia, a diferencia de otros países, se denomina a sí misma como un Estado Plurinacional.Se reconoce 36 pueblos indígenas en la nación. El 41% de la población mayor a 15 años es de origen indígena, no obstante, este porcentaje se habría incrementado para el 2017 a un 48%según proyecciones del Instituto Nacional de Estadística (IWGIA, 2020). Además, el 2009 se promulgó la Nueva Constitución Política del Estado reconociendo a los pueblos indígenas, originarios y campesinos (IOC) en el territorio.
En este contexto y con todo lo mencionado nacen nuevos creadores de contenido bolivianos. vinculados a lo indígena y popular, en diferentes plataformas digitales y redes sociales.
Conociendo al Wilfitu, a la Jhoss y a la Yola
En este reportaje se entrevistó a 3 creadores indígenas-populares de contenido digital, Yola Mamani (La Chola Bocona), Wilfredo Villca (Wilfitu Yachachiq) y Jhosselyn Santalla (jhoss_00). Cada uno incursionó en las redes sociales con objetivos diferentes, pero creando contenido desde su cotidianidad y mostrando nuestra cultura local.
Wilfredo Villca o Wilfitu Yachachiq de la comunidad de Totora, lleva puesto unos lentes de lectura y sentado en un escritorio empieza a contar quién es “yo soy quechua hablante desde mi niñez, hasta los 11 años más o menos”. Su voz torna la conversación en un diálogo, no es una entrevista. Se ríe, mientras la conversación fluye. El tono y sus palabras saltan de la pantalla “tanto las personas que quieren aprender quechua, (…) el lugar donde buscan contenido, donde buscan información, es pues las redes sociales”. Wilfitu tiene 14 mil seguidores en Tik Tok . Sus videos tienen el objetivo de revitalizar el quechua.
Jhoselyn Santalla, “cholita paceña” los colores de sus polleras y sus blusas varían de vídeo en vídeo.
Jhoss, ¿te diviertes haciendo videos?”, se escucha una sonrisa “Me divierto mucho, yo misma me río de mis propios videos” continúa “Me decía mi mamá “¿Por qué no haces video de cholita?, no hay videos de cholita, vas a ser la primera”. Jhosselyn tiene 39.6 mil seguidores en Tik Tok, su contenido gira en torno a comedia.
Yola Mamani Mamani, de la comunidad de Santa María Grande, sentada en su escritorio con un cuaderno y un lapicero en mano “Al inicio he hecho guion, y mi primer programa estaba hecho mi guion, me he equivocado y he vuelto a repetir, pero luego se ha hecho un montón de tiempo para edición y he sufrido mucho porque no sabía cual quitar o qué quitar porque todo me parecía interesante porque yo estaba diciendo y me daba pena quitarlo” se ríe y sigue la historia. Yola tiene 1.84 mil suscriptores en YouTube, su canal lleva el nombre de Chola Bocona porque “Sí, soy Chola y que darle la vuelta esa palabra con la que siempre me han hecho bajar la cabeza”.
Es decir, Bolivia ha ido incursionando en esta cultura global de las NTIC a través de una propia cultura étnica, popular, andina. Como se mencionó anteriormente en el apartado de la incursión del Internet, en Bolivia las RRSS se materializan dentro de una nueva cultura digital. Dicha cultura digital, dichas redes sociales, estos espacios habitables están repletos de una danza de nuestra propia cultura siendo ésta mediada por una NTIC. En el caso de nuestros creadores de contenido, es una mediación a través del celular.
Para seguir leyendo este artículo, visite la página del Laboratorio Tecnologías Sociales
Camila Jiménez del Laboratorio Tecnológico Social
Tomado de la página del Laboratorio Tecnológico Social